Vote No a la Propuesta E de San Francisco

Hasta el gobierno federal piensa que los ciudadanos de San Francisco merecen más información sobre la mala conducta policial, no menos. En un informe de 2016, el Departamento de Justicia de Estados Unidos recomendó que el SFPD aumentara y mejorara su registro de incidentes de uso de la fuerza. Pero en 2023, el SFPD trató de enterrar datos condenatorios que mostraban un fuerte aumento del uso de la fuerza contra la población negra: en el último trimestre de 2022, el SFPD usó la fuerza contra personas negras 25 más veces que contra personas blancas.

La disminución de las exigencias de presentación de informes sobre el uso de la fuerza facilitaría que el SFPD ocultara la violencia policial y dificultaría que el público exigiera a los agentes que se responsabilicen por su mala conducta. Con el historial de escándalos del SFPD y el persistente registro de disparidades raciales en la aplicación de la ley, la Propuesta E pone en peligro a los San Franciscanos.

La Prop E aumentaría la vigilancia policial secreta e infringiría la privacidad de los San Franciscanos. Permitiría a la SFPD rastrear y vigilar a los residentes siempre que lo deseen sin políticas de seguridad, sin consulta pública, sin supervisión y sin límites para evitar abusos. Según el fiscal de la ciudad, la Prop E incluso permitiría a la policía crear una extensa red de reconocimiento facial utilizando cámaras y drones de escaneo facial.

Según la Ordenanza de Vigilancia de San Francisco, cuya aprobación fue luchada arduamente por grupos comunitarios y vecinales en 2019, la Junta de Supervisores debe considerar las solicitudes de uso de nuevas tecnologías de vigilancia y debe adoptar normas de seguridad para proteger a los San Franciscanos de posibles abusos policiales. La Prop E elimina estos mecanismos de protección críticos. Sin ellos, no podemos proteger nuestros derechos ni hacer que la policía rinda cuentas.

La Prop E pondría en peligro a peatones, ciclistas y otros transeúntes inocentes, junto con los propios agentes de policía, al autorizar persecuciones de vehículos a alta velocidad por delitos de bajo nivel en una de las ciudades más densas del país. Desde 2018, el 38% de las 150 persecuciones de vehículos de la policía de San Francisco terminaron en una colisión, con al menos una persona herida en el 15% de esos incidentes, según datos de la Patrulla de Carreteras de California. En 2023, múltiples persecuciones vehiculares del SFPD hirieron o mataron a personas, lo que provocó llamados a revisar las políticas vehiculares del departamento. Al contrario, la Prop E permitiría aún más persecuciones imprudentes.

La Prop E impondría a la Comisión de Policía un proceso de participación de la comunidad que es redundante y oneroso, lo que permitiría que el jefe de policía bloquee cualquier cambio de política al que se oponga el departamento. Al socavar la autoridad de la comisión, la Prop E otorga a la policía el poder de vigilarse a sí misma, lo cual es una receta para el desastre.